Desde los temores de un cierre del gobierno en EEUU hasta el aumento de los rendimientos de los bonos, hay mucho de qué preocuparse... pero también para ser optimistas.
Nuestros Top Market Takeaways del 29 de septiembre de 2023.
Actualización de mercado
Superar el muro de la preocupación
Tal parece que septiembre mantendrá su reputación como el peor mes del año. Por primera vez desde 2007, esta semana, los rendimientos de los bonos del Tesoro a 10 años superaron el 4,60% y, de cara al viernes, el S&P 500 ha bajado más de 6% desde sus máximos de hace un par de meses.
Y es que no han faltado los dolores de cabeza. En conjunto, los temores de cierre del gobierno, aumento de los rendimientos de los bonos, persistente inflación, dificultades de los consumidores y preguntas en torno a China han creado un “muro de preocupación”.
Si bien prevemos que habrá más altibajos, el “muro” puede que no sea tan temible como algunos creen. Hoy analizamos cada riesgo en detalle.
1. La batalla presupuestaria del gobierno de EEUU.
Antes de la medianoche de mañana, 30 de septiembre, el Congreso de EEUU tiene que aprobar un presupuesto o un acuerdo de gasto a corto plazo (una “resolución continua”), para mantener abiertas las puertas del gobierno. El foco durante las últimas semanas ha estado más bien en lograr el acuerdo, que ofrecería financiamiento provisional, mientras continúan las conversaciones presupuestarias. Sin embargo, aún parece haber mucha distancia entre los formuladores de políticas para alcanzarlo, lo que hace que el riesgo de un cierre del gobierno sea muy real.
En un escenario de cierre, todos los departamentos “no esenciales”, como la Agencia de Protección Ambiental (EPA por sus siglas en inglés), el Departamento de Trabajo y partes del Servicio de Impuestos Internos (IRS por sus siglas en inglés) deberán cerrar. Asimismo, muchos trabajadores federales podrían ver retrasados o suspendidos los pagos de sus salarios y también podría verse afectada la presentación de reportes de datos gubernamentales clave, como los de la inflación y el desempleo.
Dicho esto, ya hemos visto varios cierres gubernamentales antes, el más largo en 2018 (duró más de un mes). Su impacto tiende a aumentar cuanto más duran, pero a medida que el gobierno vuelve a abrir, los efectos sobre el crecimiento y acciones suelen ser cortos. Por ejemplo, si analizamos la historia completa de todos los que ha habido (desde el momento en que empezaron hasta que terminaron), la renta variable, en realidad, se ha mantenido estable.
Cierres gubernamentales: ¿cómo les va a las acciones?
Retorno del S&P 500 durante cierres del gobierno estadounidense, %
En general, continuar invirtiendo durante tiempos de incertidumbre suele ser lo que más ha beneficiado a los inversionistas.
2. Tasas más altas por más tiempo.
Después de varios aumentos de tasas (entre todos suman 525 puntos básicos), la semana pasada, la Reserva Federal hizo una “pausa”, pero también señaló su intención de mantenerlas “más altas por más tiempo”, para continuar la lucha contra la inflación. Este anuncio generó un doloroso aumento en las tasas efectivas y ha llevado a los inversionistas a preguntarse si están pagando un precio justo por las acciones.
Es posible que aún se produzcan más alzas de las tasas efectivas, pero no esperamos que se prolonguen indefinidamente. Con tasas de endeudamiento tan altas, la decisión de permanecer en efectivo y ahorrar, en lugar de gastar o invertir, es cada vez más difícil. Esto ejerce presión sobre el crecimiento y, en algún momento, debería hacer que los bonos se estabilicen o, más bien, caigan. Es más, los elevados niveles actuales ofrecen un punto de entrada más defensivo e ingresos atractivos. Hace un poco más de tres años, el Tesoro a 10 años estaba en un mínimo histórico de 0,5%.
Cuando se trata de acciones, la reciente venta masiva indica que las valuaciones son ahora más razonables. El S&P 500, actualmente en 18,1x, cotiza justo por encima de su promedio a largo plazo y, si se excluyen las siete empresas de mega capitalización que han liderado el repunte, el panorama luce aún mejor. Centrarse únicamente en las valuaciones también ignora la experiencia real de las empresas, ya que el índice ha sufrido tres cuartos de caídas en sus ganancias y las expectativas han aumentado constantemente durante los últimos seis meses.
A pesar de toda la preocupación, este contexto podría impulsar las acciones a nuevos máximos durante el próximo año.
3. Inflación persistente.
El alza de la energía también ha causado cierta angustia. Esta semana, el crudo WTI llegó a 95 dólares por barril, lo que, a su vez, impulsó el precio promedio de la gasolina regular estadounidense a 3,85 dólares por galón, frente a los 3,50 dólares de hace apenas unos meses. Es más, el aumento de las huelgas por mejores salarios ha puesto de relieve los efectos en cadena de mercados laborales ajustados y generado preocupación sobre la presión que sueldos más altos podrían ejercer sobre la inflación.
En definitiva, no creemos que esta dinámica deshaga todo el progreso de la Reserva Federal y vemos un mayor enfriamiento durante el próximo año (incluso si accidentado). Más señales que no apuntan a una futura caída de los precios del petróleo. Los del alquiler, en descenso para los nuevos arrendamientos, indican una inflación de vivienda más suave. Y cuando se trata de los paros laborales, las negociaciones entre Teamsters/UPS y SAG/estudios de Hollywood muestran que es posible llegar a un acuerdo y que el impacto económico más amplio es mínimo.
Inflación de servicios ha sido especialmente difícil
Cambio interanual del Índice de Precios al consumidor (IPC) básico de EE.UU., %
No obstante, la inflación podría ser más alta en este ciclo y eso significa que alternativas como los activos reales pueden ofrecer protección, así como acceso a tendencias de largo plazo en torno a la política industrial y transición energética.
4. Dificultades del consumidor.
Sin duda, hay puntos débiles: el exceso de ahorro prácticamente ha desaparecido, los precios más altos de la energía irritan, las tasas hipotecarias fijas a 30 años están muy por encima de 7%, la morosidad en las tarjetas de crédito está en aumento (desde una base muy baja) y el fin de la moratoria de la deuda estudiantil amenaza con apretar los bolsillos de los millennials.
Coste de comprar vivienda en niveles históricamente altos
Promedio nacional de tasa hipotecaria fija a 30 años en Estados Unidos, %
Finanzas de los hogares todavía son saludables
Pagos de deuda de hogares estadounidenses como porcentaje del ingreso disponible
5. China: de las preocupaciones sobre el crecimiento a la geopolítica.
El proceso de reapertura de China ha sido decepcionante y el enfoque de estímulo fragmentado ha dificultado la estabilización del mercado inmobiliario y de la economía en general.
De cara al futuro, la geopolítica siempre es un riesgo, pero algunas señales positivas sugieren que las medidas más pequeñas están empezando a tener un impacto agregado. Mientras esperamos para saberlo, también recordemos que el impacto económico y de mercado de China sobre el resto del mundo no es tan grande como muchos piensan. Por ejemplo, sólo 1,5% de los ingresos corporativos estadounidenses provienen de ventas en ese país. Esto significa, que los desafíos que enfrenta no deberían descarrilar nuestra visión más amplia de los mercados.
Consideraciones de inversión
Invertir en tiempos de incertidumbre
Es posible que haya más dificultades y volatilidad en el camino, pero todavía vemos potencial para mercados más altos el próximo año.
Si bien los retrocesos son dolorosos, recordemos que las ventas masivas no son tan inusuales. Si nos remontamos a 1980, el año promedio ha experimentado una reducción de alrededor de -14%. La de este año es aproximadamente la mitad. Es más, continuar invirtiendo tiende a ser un mantra gratificante para los inversionistas. A pesar de esas caídas, las acciones terminaron el año con ganancias en un 75% de las veces.
La volatilidad es normal: no permita que descarrile sus planes
Caídas intra anuales de S&P 500 (reducciones máximas) y retornos del año calendario
Finalmente, creemos que los mercados pueden superar el “muro de la preocupación”, aunque les lleve algún tiempo. Y ahora cuando las acciones tanto como los bonos están sufriendo, hay un punto de entrada aún más atractivo para los inversionistas de activos múltiples.
Su equipo de J.P. Morgan está aquí para analizar las oportunidades específicas para su cartera.
El Standard and Poor's 500, o simplemente S&P 500, es un índice bursátil que sigue el desempeño de las acciones de 500 de las empresas más grandes que cotizan en la bolsa de valores de Estados Unidos y uno de los más monitoreados.
Todos los datos de mercado y económicos a septiembre de 2023 y obtenidos de Bloomberg y FactSet a menos que se indique lo contrario.
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CONSIDERACIONES DE RIESGO
- El desempeño pasado no es indicativo de resultados futuros. No puede invertir directamente en un índice.
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- Existen consideraciones de riesgo adicionales para todas las estrategias.
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