Autores: Alex Wolf, Julia Wang, Timothy Fung, Yuxuan Tang, Weiheng Chen
Después de décadas de un histórico desarrollo económico, China enfrenta desafíos estructurales cuya confluencia no tiene precedentes. El modelo se está alejando de un crecimiento liderado por el sector inmobiliario y la construcción para adentrarse en territorio inexplorado. En medio de esta transición, la carga de la deuda de los gobiernos locales y empresas estatales sigue en aumento, la confianza es débil y el exceso de capacidad empuja los precios a la baja, generando una deflación absoluta.
Nuestros principales argumentos: A pesar de que los mercados se han recuperado, seguimos adoptando una visión neutral sobre la renta variable china hasta que se dé más apoyo político y surjan signos de una reflación genuina. En cuanto al tipo de cambio, podríamos cubrirnos frente a la depreciación del yuan chino (CNH) debido al elevado diferencial de los tipos de interés frente a Estados Unidos, los riesgos bajistas para el crecimiento a corto plazo y unas perspectivas de exportación inciertas que podrían seguir ejerciendo presión sobre la moneda. En cuanto al crecimiento, seguimos adoptando una visión ligeramente por debajo del consenso y esperamos que el crecimiento total del PIB esté en el rango del 4,0-4,5 %.
En este contexto incierto, han surgido varias preguntas, tanto sobre las perspectivas a corto plazo como sobre la trayectoria a largo plazo. A continuación abordamos las principales preguntas que tenemos con los inversores.
¿Por qué es tan importante el sector inmobiliario?
Los inversionistas que quieran intentar entender lo que está pasando en la economía china deben comenzar con el sector inmobiliario. Desde la crisis financiera mundial, la construcción se convirtió en el motor clave y en su punto máximo representó casi 30% de la actividad económica.
Actividad inmobiliaria y de construcción es más alta en China que en casi cualquier país en la historia
Proporción del PIB en actividades relacionadas con bienes raíces por país, %
Sector de vivienda chino llegó a ser una de las clases de activos más grandes del mundo
Valuación de diferentes clases de activos en 2017, billones de yuanes
Precios de vivienda en China parecen estar subiendo, aunque otros ejemplos sugieren que las caídas podrían persistir
Precios reales de vivienda, indexados (máximo = 100)
En cierto modo esto era inevitable. Ninguna burbuja es eterna y la eliminación de los excesos debía ocurrir en algún momento. Es difícil exagerar el impacto económico. Un artículo de Rogoff, Kenneth y Yang1 indica que una caída de 20% de la actividad inmobiliaria podría conducir a una subsecuente reducción de 5%-10% del Producto Interno Bruto (PIB). Los datos actuales muestran un descenso de 60%, lo que se traduciría en un impacto potencialmente mayor sobre el PIB. Esta situación está creando un lastre significativo para la economía y actualmente no existen otros “motores” de crecimiento lo suficientemente grandes como para llenar ese vacío.
¿Por qué es preocupante la deflación?
La débil demanda procedente del sector inmobiliario está ejerciendo presión sobre los precios, lo que ha llevado a tres trimestres consecutivos de deflación absoluta.
Poca demanda de China pesa sobre los precios y lleva a deflación total
Deflactor del Producto Interno Bruto, % interanual
Esto genera un impacto en varias áreas. La deflación dificulta que los gobiernos locales y empresas estatales paguen su deuda, lo que, a su vez, ejerce presión sobre el desarrollo de infraestructura y la financiación de estímulos. También existe el riesgo de que afecte psicológicamente a consumidores y empresas, los cuales podrían retrasar sus compras o inversiones con el argumento de que los precios podrían caer y así empujarlos aún más a la baja y dificultar que el ciclo deflacionario acabe (pensemos en las “décadas perdidas” de Japón).
Estas presiones negativas están provocando una considerable incertidumbre sobre la trayectoria futura del crecimiento y, en general, una menor confianza.
¿Qué pasa con el entorno internacional?
Un contexto internacional más desafiante también está teniendo un efecto sobre la inversión extranjera en China. Si bien es difícil identificar un factor específico, la tendencia es claramente en contra, con ambas retrocediendo. No es justo extrapolar a partir de un solo trimestre, pero esto es algo que, seguramente, debemos seguir de cerca.
Flujos de inversión hacia China se han vuelto negativos
Inversiones directas y de cartera en China, miles de millones de dólares
En medio de las perspectivas de lento crecimiento ¿ha sido la Asamblea Popular Nacional (APN) un punto de inflexión?
El pasado 11 de marzo concluyó oficialmente la influyente APN. Históricamente, sus discusiones han girado en torno al objetivo de crecimiento del PIB y la configuración de políticas para respaldarlo. Sin embargo, este año fue un poco diferente. Si bien el objetivo, de “alrededor 5%”, está en línea con las expectativas, las autoridades solo prometieron un estímulo modesto, lo cual pareció decepcionar al mercado. También hay una clara falta de énfasis en el ritmo del crecimiento para, más bien, favorecer uno “de calidad”, medido en función de si es consistente con la transición económica a largo plazo.
¿Cuáles son las prioridades del gobierno a largo plazo?
El reporte del gobierno enumera 10 prioridades, pero en realidad sólo hay tres grandes. La primera es lo que ahora se denomina “nuevas fuerzas productivas”, es decir, mejoras en la fabricación, innovación y apoyo a industrias y tecnologías emergentes. La segunda es la reforma de la educación superior y la tercera reconoce que “el crecimiento no es sólido” y se centra en estabilizar el consumo interno e invertir en infraestructura esencial.
¿Qué diferencias en términos de políticas habrá de ahora en adelante?
El resultado es un claro cambio de paradigma en la formulación de políticas. Ahora hay menos énfasis en las metas numéricas de crecimiento a corto plazo y en el conjunto de herramientas asociadas que normalmente se utilizan para alcanzarlas, y la atención se centra en implementar una nueva visión de desarrollo económico. Sin embargo, persisten interrogantes importantes sobre si sus capacidades científicas y tecnológicas pueden satisfacer sus aspiraciones. A lo largo de la historia, los países con ingresos medios (como lo es China) han aspirado a obtener ingresos altos a través de la creación de tecnologías avanzadas. Pocos lo han logrado, y aún menos alcanzado esas capacidades solo con una política industrial agresiva. Las reformas basadas en el mercado han sido fundamentales.
Reformas basadas en el mercado fueron clave para mantener mayores tasas de crecimiento, como Corea y Taiwán
Crecimiento del PIB en diferentes niveles de desarrollo según el PIB per cápita
¿Qué significa esta dirección en las políticas para la economía?
Si bien las prioridades políticas a largo plazo son bastante claras, en el corto plazo, la falta de un respaldo político significa que existe cierto riesgo a la baja para el objetivo de crecimiento. Este es particularmente el caso, porque el mercado inmobiliario es aún inestable y la confianza débil. Nuestra estimación de PIB para este año es de 4%-4,5%, mientras que el del consenso es 4,6%. La mayoría de los supuestos de los economistas incorporan un flujo constante de apoyo a la política fiscal, que puede ser menor o llegar más tarde de lo esperado. Ciertamente, esto también abre otra posibilidad de algún ajuste hacia mediados de año, potencialmente hacia un mayor esfuerzo en el segundo semestre.
¿Por qué no se han entregado los estímulos?
Ésta ha sido la principal pregunta de los inversionistas durante los últimos dos años. Si bien es probable que exista una combinación de razones, en nuestra opinión la clave está en el cambio de paradigma en la formulación de políticas. La respuesta gubernamental ha estado motivada por la decisión de alejarse del antiguo modelo de crecimiento (propiedad y alto apalancamiento) y girar hacia uno nuevo, que dependa menos de la deuda y esté más impulsado por industrias avanzadas. Este es el pensamiento fundamental detrás de la falta de énfasis en el aumento del PIB a corto plazo y la renuencia a recurrir a herramientas monetarias y fiscales tradicionales.
También existen barreras objetivas. Las altas tasas de interés estadounidenses limitan el rango y rapidez con que el Banco Popular de China puede recortar las tasas de política. Como resultado, las tasas reales han aumentado a medida que ha caído la inflación. Los gobiernos locales ya están muy endeudados y sus balances se han visto significativamente perjudicados como resultado de la corrección del mercado inmobiliario, ya que su principal fuente de ingresos, por la venta de terrenos, ha disminuido. Esto significa que no están en condiciones de dirigir el estímulo fiscal como en el pasado.
Ingresos por venta de tierras de gobiernos locales han bajado mucho
Ingresos por venta de tierras, 100 millones de yuanes
La moneda es otra limitación, ya que recortar las tasas de manera demasiado agresiva o expandir dramáticamente la oferta podría causar presiones de depreciación que agreguen una complicación adicional no deseada. En la última década, han habido muchas críticas al estímulo de cuatro billones de yuanes que se dio durante la crisis financiera mundial y muchos han citado una mala asignación de capital y bajos retornos. Por tanto, estos paquetes de medidas tienden a tener mala reputación.
Muchos inversionistas internacionales también se han preguntado por qué China no ha implementado ningún estímulo directo para los hogares. Se percibe que esa política es insostenible y las autoridades prefieren utilizar el espacio fiscal para la inversión, en lugar del consumo. Ciertamente los enfoques pueden cambiar, pero medidas como la transferencia directa a los hogares no tienen precedentes en el país.
En los próximos meses, algunas de estas limitaciones podrían aliviarse, lo que abre la posibilidad para aplicar políticas más favorables en el segundo semestre. Un primer semestre más débil de lo esperado y las persistentes preocupaciones sobre la deflación también pueden llevar a una mayor disposición para flexibilizar la política monetaria. Por ejemplo, una vez que tengamos más claridad sobre la trayectoria de las tasas de interés estadounidenses, el Banco Popular de China puede sentirse más seguro de reducir las del país. Mientras tanto, el gobierno central ha indicado que puede realizar más emisiones de bonos. A medida que la política fiscal regresa al banco central puede volverse más proactiva.
En resumen, el gobierno está tratando de diseñar una transición hacia un nuevo modelo económico, pero ésta no es lineal ni fluida. El riesgo es que haga muy poco durante demasiado tiempo y que las nuevas industrias de alta tecnología no se materialicen o sean demasiado pequeñas para impulsar el crecimiento general.
Las acciones han subido significativamente desde sus mínimos: ¿es este el comienzo de un nuevo mercado alcista?
Las acciones chinas se han recuperado desde los mínimos de febrero: el CSI300 local subió alrededor de 13% y el MSCI China 12%. Muchos inversionistas se preguntan si esto es sostenible y qué se necesita realmente para impulsar un repunte sostenido del mercado. En general nos mantenemos neutrales. En el corto plazo, creemos que gran parte del avance ha estado liderado por una reducción de la brecha de valuación con el resto del mundo. Después del aumento, el CSI300 cotiza a una relación precio/ganancia de 13 veces, en comparación con 14 veces del MSCI Mundo Todos los Países excepto Estados Unidos, lo que significa que no hay un descuento de valuación significativo. Además, el tono de la APN fue conservador y los compradores de acciones pueden interpretar que el poco énfasis en los objetivos numéricos de crecimiento a corto plazo significa una falta de apoyo político a favor del futuro.
Para lograr un aumento sostenible de la renta variable, vemos dos áreas de políticas como posibles catalizadores. La primera es un plan integral para el sector inmobiliario, en particular uno que aborde la pérdida de confianza en las preventas de los promotores, además de estabilizar las finanzas de estos e intentar evitar nuevos impagos. Restaurar la confianza en los bienes raíces puede ayudar a una mejora más amplia de la confianza y a que la economía vuelva a encontrar impulso.
Preventas de promotores inmobiliarios chinos han colapsado
Superficie en construcción y terminada, millones de metros cuadrados
La segunda es el estímulo del lado de la demanda y, específicamente, las medidas que se centran en el consumo interno y la demanda agregada amplia. Hasta ahora, la mayor parte del esfuerzo se ha dirigido al lado de la oferta, lo cual, si bien ha aumentado la capacidad manufacturera, ha hecho poco para estimular una demanda más amplia o aliviar la deflación.
En el caso de los hogares es poco lo que se ha hecho. Dado que la demanda no alcanza a la oferta, se necesitan más medidas para rejuvenecer el ciclo económico y evitar que el malestar económico se arraigue. Ciertamente existen limitaciones y China ya no tiene el espacio político de 2009, 2012 o 2015, cuando lanzó la última ronda significativa de incentivos. Sin embargo, todavía hay cierto margen y no hacer nada podría presentar un riesgo mayor para el crecimiento.
A finales de enero esperábamos que el mercado externo experimentara un repunte táctico, ya que los gestores de fondos coincidieron en su mayoría en que la valuación china parecía haber encontrado apoyo y que el posicionamiento era corto. Sin embargo, hasta ahora, el nivel de convicción sobre un cambio estructural sigue siendo bajo. Creemos que las bolsas de valores locales probablemente hayan tocado fondo (Índice Hang Seng 15.000-15.500/MSCI China 50-51/ CSI300 3.100-3.200), pero China aún podría ser considerado un mercado de rango limitado hasta que haya más avances en las políticas descritas anteriormente. Nuestra preferencia a largo plazo sigue siendo el mercado interno, dada su inclinación política y perfil de propiedad nacional.
¿Qué pasa con el riesgo cambiario?
En términos de la moneda, existen limitados catalizadores alcistas. Históricamente, el yuan ha tenido una beta fuerte respecto al sentimiento de riesgo de las acciones y, como el apoyo a corto plazo no es suficiente, el traspaso hacia las divisas probablemente será atenuado. La narrativa política hacia la moneda prácticamente no ha cambiado, según lo descrito por el Informe del Trabajo, y ha permanecido estable, en niveles razonables. Las medidas de intervención en el mercado externo durante la APN también estuvieron alineadas con lo que el Banco Popular de China ha hecho durante los últimos seis meses, es decir, mantener el tipo de cambio dólar/yuan en torno a 7,20.
Es probable que el Banco Popular de China mantenga políticas monetarias acomodaticias, lo que significa que el diferencial negativo de las tasas de interés frente al dólar probablemente no cambiará. Esto presenta la oportunidad de cubrir la moneda local o realizar operaciones de carry. Si bien las intervenciones proactivas podrían poner un límite a lo alto que puede llegar el tipo de cambio dólar/yuan, los riesgos a la baja para el crecimiento a corto plazo, perspectivas de exportación inciertas y excesos geopolíticos probablemente seguirán presionando al yuan, por lo que tenemos una visión cautelosa sobre la exposición a éste.
¿Tiene la desaceleración económica un lado positivo? ¿Puede el consumo seguir aumentando como motor del crecimiento?
Curiosamente, a pesar de los obstáculos del sector inmobiliario, la demanda de los consumidores se ha mantenido estable. Los datos de las vacaciones del Año Nuevo chino resultaron mejores de lo esperado, especialmente en lo que respecta a los viajes. La trayectoria a largo plazo probablemente dependerá del crecimiento de los ingresos y de las tendencias de productividad (que no están claras). La desaceleración inmobiliaria podría tener un lado positivo que se ha pasado por alto.
Históricamente, China ha gastado mucho en vivienda. En 2022, hasta 14% del PIB se dedicó a este sector y más de 80% de las operaciones eran de propiedades adicionales, es decir, compras especulativas o de inversión. Esto absorbía una gran cantidad de capital, elevaba la tasa de ahorro general y reducía el consumo en otros artículos. Una reasignación a propiedades excedentes podría permitir que se reconduzca más capital hacia el consumo o inversiones productivas en otros segmentos (como el turismo y otros bienes de consumo). Cabe señalar que esto supondría un cambio en los patrones de gasto, pero no necesariamente impactaría el crecimiento agregado.
Reducción de “consumo” de vivienda puede ayudar a otras áreas de gasto
Ingreso y consumo de los hogares, % del PIB
Esta es una de las razones por las que las investigaciones sobre el efecto riqueza de la vivienda en China no son concluyentes. Si bien está claro en países como Estados Unidos, en los que una caída de los precios conduce a un consumo más débil, la evidencia en el caso chino es menos contundente. Y esto se debe, en gran medida, a que propiedades con precios altos a menudo hacían que parecieran incluso más atractivas. Asimismo, el aumento de los requisitos de pago inicial para las segundas residencias llevó a que una proporción cada vez mayor de ahorros se destinasen a este tipo de inversión. Con unas perspectivas inmobiliarias más frías, los ahorros podrían reasignarse hacia el consumo u otras áreas. Por estas razones, seguimos enfatizando que la selectividad es clave, ya que algunos sectores pueden seguir resistiendo a pesar de la desaceleración más generalizada.
¿Qué significan los desafíos económicos de China para el resto del mundo?
Hay buenas y malas noticias en lo que respecta a la economía global. Por un lado, la combinación de una creciente capacidad manufacturera y el debilitamiento de la demanda interna de China podría generar nuevas fricciones comerciales. Su superávit comercial en productos manufacturados ahora supera el 2% del PIB mundial, uno de los mayores jamás vistos en la historia. Asimismo, si continúa logrando sus objetivos de crecimiento y, al mismo tiempo, centrándose en la autosuficiencia y reducción de las importaciones de componentes clave, también podría agregar a las fricciones comerciales.
Crédito al sector inmobiliario se ha redirigido hacia el industrial
Préstamos de instituciones financieras de China a sectores inmobiliario e industrial, % interanual
Exceso de oferta de China ayuda a reducir la inflación de bienes en Estados Unidos, especialmente en relación con otros exportadores
Precios de importación de Estados Unidos, % interanual
En términos del impacto general sobre el crecimiento, el de China, especialmente desde 2013, ha importado menos de lo que comúnmente se cree. Los vínculos del PIB con Estados Unidos y Europa son mínimos, aunque los que mantiene con los ingresos corporativos son un poco mayores, pero se concentran en pocos sectores.
¿Cómo puedo pensar en China en relación con mi cartera?
Algunos inversionistas tienden a tener carteras sobreexpuestas a China basándose en la noción de que las altas tasas de crecimiento pueden generar retornos altos, lo que no ha sido el caso de las acciones en el largo plazo. El país representa alrededor de 2% de una cartera de acciones diversificada a nivel mundial, por lo que recomendamos variar las asignaciones excesivamente enfocadas en éste.
Algunos inversionistas globales tienden a estar sobreexpuestos a acciones chinas
Asignación geográfica del Índice MSCI Mundo Todos los Países
Definiciones de índices
MSCI Mundo Todos los Países es un índice ponderado por capitalización de mercado ajustado por flotación libre, diseñado para medir el desempeño de bolsas de valores de países desarrollados (23 índices) y emergentes (24 índices).
El Índice MSCI China captura la representación de capitalización grande y mediana de acciones locales A, H, B, P y rojas, así como las cotizaciones extranjeras (por ejemplo, ADR). Con 740 componentes, cubre alrededor de 85% de este universo de acciones chinas. Actualmente, incluye acciones de gran capitalización A y mediana capitalización A, representadas al 20% de su capitalización de mercado ajustada por capital flotante.
CSI 300 (índice de acciones A de China) es un índice bursátil ponderado por capitalización, diseñado para replicar el desempeño de las 300 principales acciones negociadas en la Bolsa de Valores de Shanghái y la Bolsa de Valores de Shenzhen.
Hang Seng es un índice ponderado por capitalización flotante de una selección de empresas de la Bolsa de Valores de Hong Kong. Sus componentes se dividen en cuatro subíndices: Comercio e Industria, Finanzas, Servicios Públicos y Propiedades. Fue desarrollado con un nivel base de 100 al 31 de julio de 1964.