Estrategia de inversión

España: Cómo comprar una propiedad residencial

9/03/2023

Aspectos fiscales y legales que los no residentes deben tener en cuenta.

Al igual que en otros países europeos regidos por el derecho civil, como Francia y Bélgica, el proceso de adquisición de bienes inmuebles en España es formal. Se gestiona a través de un contrato, que contiene todos los términos y condiciones de la transacción, y debe ser firmado ante un notario público y luego presentado en el Registro Oficial de la Propiedad. El documento incluye detalles e información adicionales sobre la propiedad, como el tamaño, ubicación, límites, detalles físicos, etc., y también puede ser encontrado en la oficina catastral de la autoridad local, conocida comúnmente como catastro. Las partes también pueden celebrar un acuerdo de preventa (contrato de arras o señal) en el que se establecen los principales términos de la transacción. 

Para reservar la propiedad y obtener el compromiso del dueño, el comprador realiza un depósito, cuya cantidad normalmente equivale al 10% del precio. Ninguno de los dos puede ser liberado del contrato, excepto si se produce el incumplimiento de las condiciones específicas de venta, en cuyo caso puede haber sanciones de acuerdo a lo previamente pactado.

En este artículo, examinamos las implicaciones fiscales clave involucradas en la compra de bienes inmuebles en España por parte de no residentes y la tributación de ingresos derivados de propiedades en alquiler.

Compra de bienes raíces

Al comprar una residencia en España, es importante calcular los impuestos locales. Como regla general, puede anticipar que los tributos y comisiones (por servicios profesionales prestados) ascenderán a aproximadamente al 10% del valor total de la propiedad.

En el momento de la compra/venta de una propiedad española por parte de un no residente, hay tres impuestos principales que considerar:

  • ITP (Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales o impuesto de transferencia de propiedad): una persona que adquiera una propiedad usada debe pagar un impuesto de reventa, que generalmente tiene una tasa fija del 6%, aunque ésta puede variar dependiendo de la provincia y otros factores como edad del comprador, miembros de la familia, precio de compra, etc.
    Por su parte, la compra de residencias nuevas o en construcción está sujeta al 10% de Impuesto al Valor Agregado (IVA). También se debe pagar un impuesto del timbre del 0,5% (igualmente puede variar por región). A los terrenos, locales comerciales o plazas de aparcamiento en garajes se les aplica la tasa más alta, que es del 21%.
  • IRNR (Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, o impuesto sobre la renta de no residentes sobre las ganancias de capital): al vender una propiedad con fines de lucro se debe pagar un impuesto a las ganancias de capital. Si se trata de una persona no residente, el comprador (a través del notario) retiene 3% del precio total para asegurar que el vendedor cumpla con sus obligaciones fiscales. Esta cantidad sirve como depósito sobre el pago final.
    La ganancia de capital es la diferencia entre el precio de venta declarado y el pagado cuando originalmente se compró la propiedad, más los gastos en reformas y mejoras realizadas desde entonces.
    Desde 2016, el tipo impositivo aplicable a los no residentes es del 19%.
    Todo vendedor que sea mayor de 65 años, residente legal en España y haya utilizado el inmueble como domicilio habitual está exento del pago de este impuesto.
  • IVTNU (Impuesto sobre el Incremento de Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana). Los vendedores también pagan un impuesto determinado por las autoridades locales (según dónde se encuentre la propiedad).

Adicionalmente, hay otros costos, relacionados principalmente con honorarios de abogados (aproximadamente 1% del precio final) y gastos de notaría y registro, los cuales son fijados por las autoridades españolas y cuyo importe final dependerá del valor de la propiedad. El notario debe de estar presente cuando se firman el contrato de compraventa y las escrituras.

En el pasado, los altos precios de las residencias existentes hacían que, a menudo, comprar solo el terreno fuera mucho más barato, aunque el proceso de compraventa es igual de complicado que cuando ya hay una propiedad construida. Sin embargo, desde entonces, los precios de las viviendas usadas han bajado, por lo que adquirir un terreno sin desarrollar puede ya no ser la estrategia más rentable.

Las leyes agrarias españolas son complejas. Es muy importante elegir el terreno adecuado para evitar problemas futuros como falta de permisos para obras y riesgo de revocación. Además, una vez comprado, deberá contratar a un arquitecto, enviar los planos de diseño para aprobación y obtener el permiso de planificación. También tendrá que encontrar una empresa constructora de confianza y supervisar los trabajos que ésta realice.

Arrendamiento de bienes raíces

Los residentes en el extranjero sin establecimiento permanente en España tributan únicamente por “rentas de fuente española”, que son las obtenidas directa o indirectamente de bienes inmuebles, incluyendo las “rentas teóricas de disfrute” de propiedades.

Como principio general, cada elemento de renta tributa por separado en declaraciones específicas o trimestrales (no existe una anual). El impuesto se grava generalmente sobre los ingresos brutos sin deducciones por gastos. Existen algunos principios básicos de tributación para los no residentes:

  • Si es propiedad directa de personas físicas, se gravará al propietario una renta de goce del 24% (2% del valor catastral, es decir, el valor asignado al inmueble por la oficina catastral, o del 1,1% si éste se ha actualizado en los últimos 10 años). Para los residentes de la Unión Europea o del Espacio Económico Europeo, la tasa es del 19% desde 2016.
  • Si la propiedad se ha adquirido a través de una sociedad extranjera con residencia fiscal o domiciliada en un país considerado paraíso fiscal, se grava un impuesto del 3% anual sobre el valor catastral. Si los activos/participaciones de la empresa en España representan más de 50% de su base patrimonial, a efectos fiscales será considerada española. Entre las posibles alternativas para evitar que esto suceda se encuentran migrar la empresa a otra jurisdicción o diluir la base de activos existentes en el país.

Impuesto sobre el patrimonio: este impuesto aplica a activos y empresas inmobiliarias poseídas por personas físicas no residentes (no por entidades corporativas). La base imponible es el valor neto de la propiedad (valor real menos gravámenes y deudas relacionados con la inversión en dicho bien). La tasa máxima es de hasta el 2,5%, pero puede variar entre provincias. De hecho, en algunas, puede haber ciertas exenciones, créditos fiscales y beneficios disponibles, pero los criterios deben ser cuidadosamente analizados caso por caso.

  • IBI (Impuesto sobre Bienes Inmuebles o impuesto anual sobre la propiedad): lo establecen las autoridades locales y depende tanto del valor de la tierra como de la propiedad. Es anual y se puede pagar directamente cuando se recibe el aviso o programar pagos automáticos desde una cuenta bancaria española (esta puede ser la mejor opción si el propietario no vive en el país todo el año). Uno de los documentos exigidos por ley en cualquier compraventa de inmuebles es el justificante de pago del año anterior, el cual debe ser entregado por el vendedor.
  • Contribuciones locales: los propietarios en España también deben contribuir anualmente con el alumbrado público, mantenimiento de las instalaciones y recolección de basura. El importe depende de la zona y se paga al ayuntamiento.

Alquiler de su propiedad española

Si desea alquilar su propiedad, es una buena idea contratar los servicios de un agente de propiedad inmobiliaria (API), quien se encargará de los trámites legales del proceso. Su comisión es un porcentaje del alquiler semanal o mensual (de ser a corto plazo) o el equivalente a un mes de alquiler si es a largo plazo (al menos un año).

Si busca rentar a corto plazo (por ejemplo, a turistas), también deberá verificar que la propiedad tenga licencias para uso turístico y alquiler vacacional aprobadas por las autoridades locales. Quien opere sin éstas está sujeto a multas.

En general, la base imponible estará constituida por el importe total del alquiler sin deducción de gastos.

Para inmuebles arrendados, deberá computarse la totalidad del importe percibido (incluyendo todos los activos de la propiedad) como renta, más no el IVA. No obstante, en el caso de contribuyentes que residan en otro estado miembro de la Unión Europea o del Espacio Económico Europeo en el que exista un intercambio efectivo de información para la determinación de la base imponible, podrán deducirse gastos cuando el contribuyente acredite que están directamente relacionados con los rendimientos obtenidos en España y que tienen un vínculo económico directo e indisoluble con la actividad desarrollada en el país.

Si el inmueble está arrendado sólo por una parte del año, el contribuyente deberá determinar el valor para los meses que haya durado el arrendamiento, y, para los demás, deberá calcular la parte proporcional de ingresos imputados (1,1% o, en su caso, 2% del valor catastral).

Impuesto sobre la Renta de No Residentes (IRNR) aplicable:

  • Residentes Unión Europea, Islandia, Noruega y, desde el 7 de noviembre de 2021, Liechtenstein: 19%
  • Otros: 24%

Impuesto sobre sucesiones y donaciones

El impuesto sobre sucesiones grava el valor de todos los activos considerados como españoles que sean propiedad directa de un extranjero al momento de su muerte. Desde 2022, las tasas impositivas varían desde 7,65% (hasta 8.000 euros) hasta un máximo de 34% sobre valores superiores a 800 mil euros. Estos impuestos pueden luego ser incrementados aplicando un multiplicador de 1,2 a 2,4. El tamaño depende de la riqueza existente de los herederos cuando ocurra la sucesión, así como la relación con el fallecido. En algunas circunstancias, el resultado podría ser de más de 70%.

Para reducir la aplicación de este impuesto, una opción es la adquisición de bienes inmuebles a través de una entidad corporativa. Sin embargo, sería necesaria una cadena de empresas, ya que si los únicos activos (en manos directas de un no residente) están situados en España debe ser pagado. Se recomienda precaución con este modelo, ya que requiere de un plan completo de adquisición, sin contar otras cuestiones fiscales que pueden surgir. Por ejemplo, cuando una propiedad pertenece a una empresa, se debe pagar por su uso.

En algunas provincias, ciertos créditos y beneficios fiscales podrían ser aplicables al impuesto sobre sucesiones y donaciones. Los criterios para determinarlos deberán ser cuidadosamente analizados caso por caso.

Inversiones en bienes raíces

Para personas físicas o jurídicas interesadas en invertir en inmuebles españoles, independientemente del tipo de propiedad (residencial, de alquiler, comercial, etc.), pueden ser beneficiosos otros esquemas más complejos y sofisticados.

Por ejemplo, una persona puede optar por invertir a través de una SOCIMI (Sociedad Cotizada de Inversión Inmobiliaria), similar a un grupo de inversión en activos inmobiliarios (REIT por sus siglas en inglés) de Estados Unidos, o de otros esquemas de inversión colectiva como los Fondos de Inversión Inmobiliaria.

Ambos esquemas de inversión reciben regímenes fiscales especiales con beneficios significativos tales como tasas impositivas reducidas y exenciones.

Adicionalmente, en el marco del Impuesto sobre Sociedades, las empresas españolas dedicadas al alquiler de viviendas pueden recibir un régimen fiscal especial cuando cumplan con algunos requisitos.

Para obtener más información acerca de estos vehículos de inversión, contacte con su representante de J.P. Morgan o con un miembro del Equipo Asesor de Patrimonio Internacional de J.P. Morgan.

Más información sobre cómo convertirse en cliente de la banca privada de J.P. Morgan

Por favor, cuéntenos sobre usted y un miembro de nuestro equipo le contactará

*Campos obligatorios

Más información sobre cómo convertirse en cliente de la banca privada de J.P. Morgan

Por favor, cuéntenos sobre usted y un miembro de nuestro equipo le contactará

Introduzca su nombre

> or < no están permitidos

Only 40 characters allowed

Introduzca sus apellidos

> or < no están permitidos

Only 40 characters allowed

Seleccione su país de residencia

Introduzca una dirección postal válida

> or < no están permitidos

Only 150 characters allowed

Introduzca su ciudad

> or < no están permitidos

Only 35 characters allowed

Seleccione su estado

> or < are not allowed

Introduzca su código ZIP

Por favor ponga un código postal válido

> or < are not allowed

Only 10 characters allowed

Introduzca su código postal

Por favor ponga un código postal válido

> or < are not allowed

Only 10 characters allowed

Introduzca el prefijo de su país

Introduzca el prefijo de su país

> or < are not allowed

Introduzca su número de teléfono

El número de teléfono debe constar de 10 dígitos

Por favor ingrese su teléfono

> or < are not allowed

Only 15 characters allowed

Introduzca su número de teléfono

Por favor ingrese su teléfono

> or < are not allowed

Only 15 characters allowed

Cuéntenos más acerca de usted

0/1000

Only 1000 characters allowed

> or < are not allowed

La casilla no ha sido marcada

Sus búsquedas recientes

Información importante

INFORMACIÓN IMPORTANTE

Este documento es solo para fines informativos y puede orientarle acerca de determinados productos y servicios ofrecidos por los negocios de gestión de patrimonios de J.P. Morgan, que pertenece a JPMorgan Chase & Co. (“JPM”). Los productos y servicios descritos, así como las comisiones, los gastos y los tipos de interés asociados, pueden sufrir modificaciones de acuerdo con los contratos de cuenta aplicables, además de diferir entre ámbitos geográficos.

No todos los productos y servicios se ofrecen en todas las regiones. Si es una persona con discapacidad y necesita asistencia adicional para acceder a este documento, póngase en contacto con su equipo de J.P. Morgan o envíenos un correo electrónico a accessibility.support@jpmorgan.com para obtener ayuda. Por favor, lea toda la información importante.

RIESGOS Y CONSIDERACIONES GENERALES. Las opiniones, las estrategias y los productos que se describen en este documento pueden no ser adecuados para todas las personas y comportan riesgos. Los inversores podrían recuperar menos del importe invertido y la rentabilidad histórica no es un indicador fiable de resultados futuros. La asignación/diversificación de activos no garantiza beneficios o protección contra pérdidas. Nada de lo incluido en este documento debe utilizarse como único elemento de juicio para tomar una decisión de inversión. Se le insta a analizar minuciosamente si los servicios, los productos, las clases de activos (por ejemplo, renta variable, renta fija, inversiones alterativas y materias primas) o las estrategias que se abordan resultan adecuados en vista de sus necesidades. También debe tener en cuenta los objetivos, los riesgos, las comisiones y los gastos asociados al servicio, el producto o la estrategia de inversión antes de tomar una decisión de inversión. Para ello y para obtener información más completa, así como para abordar sus objetivos y su situación, póngase en contacto con su equipo de J.P. Morgan.

NO CONFIANZA. Ciertos datos incluidos en este documento se consideran fiables; sin embargo, JPM no declara ni garantiza su precisión, su fiabilidad o su integridad y excluye cualquier responsabilidad por pérdidas o daños (directos o indirectos) derivados de la utilización, total o parcial, de este documento. JPM no formula declaraciones o garantías con respecto a los cálculos, los gráficos, las tablas, los diagramas o los comentarios que pueda contener este documento, cuya finalidad es meramente ilustrativa/orientativa. Las perspectivas, las opiniones, las estimaciones y las estrategias que se abordan en este documento constituyen nuestro juicio con base en las condiciones actuales del mercado y pueden cambiar sin previo aviso. JPM no asume obligación alguna de actualizar la información que se recoge en este documento en caso de que se produzcan cambios en ella. Las perspectivas, las opiniones, las estimaciones y las estrategias que aquí se abordan pueden diferir de las expresadas por otras áreas de JPM y de las opiniones expresadas con otros propósitos o en otros contextos; este documento no debe considerarse un informe de análisis. Los resultados y los riesgos proyectados se basan únicamente en los ejemplos hipotéticos citados y los resultados y los riesgos reales variarán según circunstancias específicas. Las declaraciones prospectivas no deben considerarse garantías o predicciones de eventos futuros.

Nada de lo indicado en este documento se entenderá que da lugar a obligación de asistencia o relación de asesoramiento alguna hacia usted o un tercero. Nada de lo indicado en este documento debe considerarse oferta, invitación, recomendación o asesoramiento (de carácter financiero, contable, jurídico, fiscal o de otro tipo) por parte de J.P. Morgan y/o sus equipos o empleados, con independencia de que dicha comunicación haya sido facilitada a petición suya o no. J.P. Morgan y sus filiales y empleados no prestan servicios de asesoramiento fiscal, jurídico o contable. Consulte a sus propios asesores fiscales, jurídicos y contables antes de realizar operaciones financieras.

CONOZCA MÁS Acerca de nuestra firma y los profesionales de la inversión a través de FINRA Brokercheck

Para conocer más sobre el negocio de inversiones de J.P. Morgan, incluyendo nuestras cuentas, productos y servicios, así como nuestra relación con usted, por favor revise nuestro Formulario CRS de J.P. Morgan Securities LLC y la Guía de Servicios de Inversión y Productos de Corretaje.

 

JPMorgan Chase Bank, N.A. y sus afiliadas (colectivamente “JPMCB”) ofrecen productos de inversión que pueden incluir cuentas de inversión administradas por bancos y custodia como parte de sus servicios fiduciarios. Otros productos y servicios de inversión como cuentas de corretaje y asesoramiento se ofrecen a través de J.P. Morgan Securities LLC ("JPMS"), miembro de FINRA y SIPC. Los productos de seguros están disponibles a través de Chase Insurance Agency, Inc. (CIA), una agencia de seguros autorizada, que opera bajo el nombre de Chase Insurance Agency Services, Inc. en Florida. JPMCB, JPMS y CIA son empresas afiliadas bajo el control común de JPMorgan Chase & Co. Productos no disponibles en todos los estados. Por favor, lea la Exención de responsabilidad legal junto con estas páginas.

LOS PRODUCTOS DE INVERSIÓN: • NO ESTÁN ASEGURADOS POR LA FDIC • NO SON UN DEPÓSITO U OTRA OBLIGACIÓN DE, NI ESTÁN GARANTIZADOS POR JPMORGAN CHASE BANK, N.A. NI NINGUNA DE SUS AFILIADAS • ESTÁN SUJETOS A RIESGOS DE INVERSIÓN, INCLUIDA LA POTENCIAL PÉRDIDA DEL MONTO DEL CAPITAL INVERTIDO

Los productos de depósitos bancarios, como por ejemplo las cuentas corrientes, de ahorros y préstamos bancarios, son ofrecidos por JPMorgan Chase Bank, N.A. Miembro de la FDIC. No es un compromiso de préstamo. Toda extensión de crédito está sujeta a aprobación de crédito.