Transferencias a herederos: ¿Cómo hacerlo con éxito?

El proceso de transferencia patrimonial a la familia suele ser complejo. Requiere determinar qué otorgará y a quién, así como tomar medidas para garantizar que lo entregado sea administrado de acuerdo con su voluntad. Para asegurar que esto ocurra, lo mejor es crear una estructura de gobernabilidad que resista la prueba del tiempo.
A menudo, vemos que se presta mucha atención a la estructura y transferencia inicial, pero luego la voluntad del benefactor no es cumplida por completo, debido a la falta de una política de distribución, estrategia de inversión y gobierno familiar bien pensados. A continuación, le compartimos las áreas clave en las que enfocarse.
¿Cuándo se distribuirán los fondos a los herederos?
Generalmente, las distribuciones funcionan mejor cuando los benefactores expresan una voluntad clara sobre cómo y cuándo los fondos deben pasar a los miembros de la familia, ya sea como donaciones directas o depósitos en fideicomisos.
Cuando los activos se mantienen en fideicomisos, las decisiones de distribución deben ser tomadas legalmente por el fiduciario. Si bien éstas pueden ser guiadas por las necesidades y circunstancias financieras de cada beneficiario, deben estar alineadas con lo establecido en el documento del fideicomiso. Para muchos fideicomisarios esta puede ser una tarea difícil, especialmente cuando hay múltiples beneficiarios en el presente y en el futuro.
Para aumentar la probabilidad de que su voluntad se cumpla, le recomendamos elegir fideicomisarios que comprendan plenamente sus responsabilidades y estén comprometidos con que sus objetivos se logren. Comunicar su intención proactivamente a los beneficiarios puede ser de gran ayuda para prevenir futuras discordias familiares o poner a los fideicomisarios en una posición complicada.
Entre las políticas de distribución que los benefactores suelen incluir en sus documentos para ser ejecutadas por los fideicomisarios se encuentran:
- Desembolsar los fondos cuando los beneficiarios alcancen una edad predeterminada o ciertos hitos en la vida, como la obtención de títulos de educación avanzada, casarse o comprar su primera casa.
- Retirar fondos únicamente de los ingresos de la cartera, no de las ventas de activos.
- Permitir que las distribuciones proporcionen un estilo de vida básico para que los beneficiarios puedan seguir vocaciones menos gratificantes financieramente o decidir más fácilmente quedarse en casa con niños pequeños.
- Administrar los activos equitativamente para favorecer tanto a los beneficiarios actuales como futuros. Nombrar un fideicomisario corporativo con amplia experiencia en esta área puede ser de gran ayuda para una familia.
- Finalmente, los fideicomisos también pueden contener disposiciones que prohíban las distribuciones en determinadas circunstancias, como si un beneficiario se divorcia o tiene un problema de abuso de sustancias.
¿Cómo se invertirá el dinero?
Ya sea que el patrimonio se deposite en un fideicomiso o entregue directamente a los herederos para que los inviertan, el enfoque disciplinado comienza con usted y prevé:
Horizonte temporal y asignación de activos: Generalmente, el primer paso es evaluar cuándo es probable que sus herederos necesiten los fondos—es decir, definir una estrategia de asignación de activos. Empiece por considerar los siguientes puntos:
- A corto plazo (cinco años): ¿La distribución está destinada a ayudar a un beneficiario a comprar una casa, pagar una deuda o iniciar un negocio? ¿O simplemente quiere ofrecer una red de seguridad psicológica y realizar una transferencia a un fondo para emergencias? En cualquier caso, es prudente proteger el capital y colocarlo en instrumentos similares al efectivo o bonos a corto plazo.
- Más a largo plazo: ¿Es su plan beneficiar a aquellos con horizontes temporales mucho más largos o a las generaciones futuras? De ser así, considere colocar los fondos en estrategias de inversión más orientadas al crecimiento, como asignaciones de capital o inversión privada más grandes, dado el potencial que tienen para generar mayores retornos durante años.
Puede encontrar más información sobre la asignación y ubicación de activos aquí.
Perfil de riesgo: Se basa en sus habilidades de inversión (y también en las de sus herederos), necesidades financieras y voluntad psicológica para asumir riesgos. En nuestra opinión, hay tres consideraciones clave:
- Riesgo requerido: ¿Cuánto riesgo es necesario para alcanzar los objetivos?
- Capacidad de riesgo: ¿Cuál es la capacidad para asumir riesgos en función de los objetivos, monto y horizonte temporal?
- Tolerancia al riesgo: ¿Cuál es la disposición para asumir riesgos? Esto podría estar influenciado por factores personales y el entorno.
Tanto el riesgo requerido como la capacidad de riesgo están anclados en los objetivos y horizonte temporal de un inversionista, por lo que son más estables, mientras que la tolerancia al riesgo es menos previsible al estar relacionada con factores personales.
¿Se preservará su patrimonio con el tiempo?
Según nuestra experiencia, las familias más exitosas:
- Tienen una visión clara de lo que quieren lograr con su patrimonio.
- Se guían por valores compartidos.
- Fomentan la comunicación abierta entre todos los miembros de la familia.
- Equilibran las necesidades de la generación actual y los intereses de las futuras.
Algunas familias optan por detallar sus políticas de gobernabilidad por escrito y revisarlas periódicamente en reuniones anuales. Otras adoptan un enfoque informal y discuten los valores y objetivos del patrimonio durante una comida u otras ocasiones más habituales.
Cualquiera que sea el enfoque que elija su familia, es fundamental que cree un marco de gobernabilidad que promueva la colaboración y compromiso compartido para preservar el patrimonio. Esto, a su vez, puede ayudar a protegerlo a usted, sus beneficiarios y su fortuna de los riesgos generados por conflictos o enfrentamientos exacerbados por mala comunicación entre los miembros de la familia, valores contrapuestos o pretensiones infundadas.
Para incrementar las probabilidades de construir un legado familiar exitoso y preparar a las generaciones futuras para administrar responsablemente el patrimonio heredado, es importante que reciban educación financiera. Reunirse con su equipo de J.P. Morgan le puede ayudar a contextualizar la distribución de fondos con la situación financiera más amplia de cada beneficiario. A menudo, esto incluye la creación de un análisis personalizado del plan patrimonial en torno a sus objetivos y hoja de balance.
Podemos ayudarle
Alinear su voluntad con sus estrategias patrimoniales y objetivos a largo plazo es un proceso en evolución. Su equipo de J.P. Morgan puede ayudarle a explorar sus opciones, evaluar su capacidad para transferir fondos y aprovechar al máximo sus planes de transferencia patrimonial. También puede apoyarle en el proceso de educación financiera de los beneficiarios más jóvenes sobre una variedad de temas como gastar, ahorrar y compartir.
Para obtener más información sobre patrimonio multigeneracional, solicite a su equipo de J.P. Morgan nuestro libro sobre sobre niños y riqueza (children & wealth workbook).
Este es el último artículo de una serie de tres sobre la transferencia patrimonial a miembros de la familia. El primero se enfoca en cómo determinar su capacidad para transferir fondos, mientras que el segundo analiza a quién, qué, cuándo y cómo hacerlo.
EXPLORE TODAS LAS POSIBILIDADES DE SU PATRIMONIO
Podemos ayudarle a navegar un panorama financiero complejo. Hablemos.
Contáctenos